La Dirección General de Consumo de la Consejería de Salud y Familias está desarrollando la primera fase de la campaña anual de inspección de disfraces, caretas, máscaras y otros productos similares dirigidos a la población infantil, con el objetivo de garantizar la seguridad y correcto etiquetado de los productos a la venta con motivo de la próxima celebración del carnaval. Los controles son realizados por el personal inspector de los Servicios Provinciales de Consumo de la Junta de Andalucía en todo tipo de establecimientos en los que se venden estos artículos, prestando especial atención a las tiendas de precio reducido y bazares.
En total, se llevarán a cabo al menos 130 controles de etiquetado a lo largo de la campaña, la mitad en esta primera fase y la otra mitad con motivo de la festividad de Halloween, cuando se vuelve a producir un incremento en las ventas de estos productos. Además, en la segunda fase de la campaña está prevista la recogida de muestras de diferentes artículos para su envío a laboratorio, donde se realizarán análisis para comprobar su seguridad.
En el caso de que se detecten irregularidades en los artículos que puedan afectar a la seguridad de las personas, se valora el riesgo y, en su caso, se incluye el producto afectado en la Red de Alerta de Productos de Consumo, un sistema de intercambio rápido de información que funciona a nivel europeo y cuyo objetivo es detectar de la manera más ágil posible artículos inseguros, con la finalidad de poder adoptar medidas que impidan la comercialización de estos productos, ya sea a través de la inmovilización o la destrucción de los mismos.
Tanto en el caso anterior como si se detectan irregularidades de tipo informativo, como, por ejemplo, que el etiquetado no esté en castellano, se remitirán las actuaciones al departamento correspondiente para el inicio del oportuno procedimiento sancionador.
Esta campaña se desarrolla en el marco del Plan de Inspección de Consumo 2020, que comprende un total de 26 campañas que supondrán aproximadamente 9.000 actuaciones de control dirigidas a garantizar y reforzar la protección de los derechos de las personas consumidoras y asegurar que los productos y servicios que están a la venta cumplen los requisitos de seguridad y calidad que exige la normativa vigente.
Recomendaciones para la compra de disfraces
Desde la Dirección General de Consumo se recomienda a la ciudadanía tomar una serie de precauciones a la hora de adquirir este tipo de productos, especialmente cuando van dirigidos a la población infantil. En primer lugar, se recomienda siempre leer con detenimiento la etiqueta y las instrucciones de uso de los productos que se vayan a adquirir, que deben estar en castellano, y prestar especial atención a los consejos de uso y advertencias de seguridad. En este sentido, es importante comprobar que el producto lleva el marcado CE, que indica que cumple con la normativa europea en materia de seguridad.
En el caso de las máscaras, es importante comprobar que cuentan con suficientes orificios de ventilación, para evitar riesgo de asfixia. En cuanto a los productos de maquillaje, hay que revisar detenidamente sus componentes, así como la fecha de caducidad antes de utilizarlos para evitar posibles reacciones alérgicas. Si se adquieren lentillas decorativas, es importante hacerlo en establecimientos con personal cualificado y elegir productos con etiquetado en español.
Asimismo, es importante verificar que los productos dirigidos a la infancia no contengan piezas pequeñas que se puedan desprender y ser ingeridas, no tengan bordes cortantes y estén fabricados con materiales no inflamables. Estos productos tampoco deben llevar cordones en la zona del cuello para así evitar estrangulamientos, y si los llevan en otras partes han de estar convenientemente asegurados.
Por otra parte, Consumo aconseja pedir y conservar siempre el ticket o factura de compra, documento imprescindible para efectuar cualquier reclamación, devolución o cambio del producto. Asimismo, se recomienda, siempre que sea posible, realizar las compras en establecimientos adheridos al Sistema Arbitral de Consumo, ya que de esta manera se garantiza que cualquier posible discrepancia pueda quedar resuelta de forma rápida y gratuita. Igualmente, se recuerda que los establecimientos deben disponer de hojas de quejas y reclamaciones a disposición del público.
Además, conviene informarse antes de la compra sobre la política de devoluciones. En el caso de las compras por Internet existe el derecho de desistimiento, que permite, con carácter general, cancelar el contrato durante un plazo mínimo de 14 días naturales desde la fecha de recepción del producto, sin tener que alegar motivo alguno y sin penalización.
Ante cualquier duda o consulta en materia de consumo, la ciudadanía puede contactar con Consumo Responde, un servicio gratuito de información general a las personas consumidoras y usuarias, impulsado por la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía. Se trata de un servicio multicanal, al que se puede acceder de forma continuada a través del número de teléfono 900 21 50 80, de la página web www.consumoresponde.es, del correo electrónico (consumoresponde@juntadeandalucia.es); del perfil de Twitter (@consumoresponde); y el de Facebook (https://www.facebook.com/consumoresponde/).
También se puede recibir asesoramiento en los Servicios Provinciales de Consumo de las delegaciones territoriales de Salud y Familias presentes en todas las capitales de provincia, así como en las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMICs), y en las organizaciones de personas consumidoras y usuarias.