Este decreto regula los derechos de los consumidores en relación con la distribución al por menor y suministro de combustibles en instalaciones de venta al público y las obligaciones de los titulares.
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A los efectos de este decreto, serán consideradas como instalaciones de venta al público tanto las estaciones de servicios como las unidades de suministro o cualquier otro punto de venta al consumidor.
Las normas contenidas en el presente Decreto serán de aplicación a otros servicios que ofrezcan la instalación, tales como tiendas, restaurantes, cafeterías, aseos, autolavados, talleres de reparaciones, cambio de aceite, venta de repuestos u otros análogos, en todo aquello que les sea aplicable y no se encuentre regulado por normas específicas.
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