Consumo realiza casi 8.400 controles entre enero y febrero para garantizar que los productos que se venden son seguros

Si se detectan irregularidades que puedan afectar a la seguridad de las personas, el producto se incluye en la Red de Alerta de Consumo    Los servicios de Consumo dependientes de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales han realizado durante los dos primeros meses del año un total de 8.326 inspecciones en establecimientos comerciales, con el fin de verificar que los productos expuestos para venta al público son seguros y cumplen la normativa vigente.    El resultado de estas actuaciones ha sido la inmovilización de 614 productos, la devolución de 269, la destrucción de 179 y la retirada de 72 unidades. Éstos últimos han sido incluidos en la Red de Alertas de productos de Consumo por incumplir los requisitos de seguridad que establece la normativa. Estas operaciones son fruto de la labor inspectora de la Junta y la desarrollada expresamente a partir de las alertas enviadas por otras Comunidades autónomas y países de la Unión Europea.    En este sentido, cuando los Servicios de Consumo detectan irregularidades que afectan a la seguridad de algún producto, adoptan las correspondientes medidas preventivas, sancionadoras o ambas, según corresponda. Además, se comunica al Instituto Nacional de Consumo para su traslado a otras Comunidades autónomas o a la Unión Europea, dependiendo de los casos, y se incluye en la Red de Alerta de productos de Consumo.    La Red de Alerta es un sistema de intercambio rápido de información por vía telemática en el que no están incluidos alimentos, medicamentos y otros productos sanitarios, que cuentan con sus sistemas propios de alerta. Funciona en tres niveles: las  Comunidades autónomas, el Instituto Nacional de Consumo y la Unión Europea, transmitiendo la información a través del Instituto y del Sistema Comunitario de Intercambio Rápido de Información (RAPEX), dependiendo de si la alerta es de ámbito nacional o comunitario.Por su parte, la Junta traslada las notificaciones recibidas de otras Comunidades Autónomas y países europeos a través del INC y las propias de la Comunidad andaluza a los servicios provinciales de Consumo y a los municipios con competencias en esta materia. De este modo, se pretende facilitar el intercambio rápido de información sobre las medidas que deben tomarse o que ya se han tomado y el seguimiento de las mismas, con la finalidad última de retirar estos productos del mercado.    Entre los productos inmovilizados en el periodo enero-febrero de 2013 hay una trompeta de juguete y un disfraz de payaso, que han sido retirados por riesgo de asfixia y quemaduras. Asimismo se ha devuelto a sus proveedores, entre otros objetos, un cargador universal, una base de enchufe de goma y juguetes de vinilo con forma de animales. Respecto a la destrucción, ha afectado sobre todo a prendas de vestir como pantalones vaqueros para niños, chándal y sudaderas, aunque también hay un set de uñas de plástico.Asimismo se han retirado de los establecimientos llaveros con punteros láser, zapatos de caballero y un termo, entre otros efectos.        Alertas notificadas por AndalucíaEn los dos primeros meses del año, la Junta ha notificado al Instituto Nacional de Consumo un total de 8 alertas de las que 5 corresponden a objetos que pueden provocar asfixia por obstrucción de las vías respiratorias, en concreto un silbato de madera, un objeto decorativo con forma de melocotón, un juguete de construcción, un espantasuegras y una flauta. Las otras tres alertas están motivadas por el riesgo de quemaduras que puede provocar una máscara de color verde con tela negra para cubrir la cabeza, un conjunto de cuatro caretas de cartón y un cable de interconexión.La información relativa a estas alertas puede consultarse en la página Web de la Consejería de Administración Local y Relaciones Institucionales de la Junta de Andalucía http://www.calri.junta-andalucia.es/administracionlocalyrelacionesinstitucionales/opencms/portal/portada.jsp, en la de Consumo Responde https://www.consumoresponde.es/alertas y en la del Instituto Nacional de Consumo (INC). En estas páginas se facilita información con el nombre del producto, junto a una foto para facilitar su identificación, así como una breve descripción de las lesiones que puede provocar y que son el motivo de su retirada de los circuitos comerciales.  Por otra parte, las actuaciones de Consumo realizadas durante 2012 se cifran en 83.272 inspecciones, que han desembocado en 4.460 unidades intervenidas y la incorporación a la Red de Alerta de productos de consumo de un total de 69 artículos.RecomendacionesLa Secretaría General de Consumo recomienda leer bien la etiqueta y las instrucciones de uso, si las hubiera, antes de adquirir un producto. En este sentido, aconseja prestar especial atención a indicaciones como la edad recomendada si se trata de juguetes, los consejos de seguridad y la empresa responsable del producto por si surgiera algún problema.  Si se trata de juguetes y material eléctrico, debe comprobarse que sobre el artículo o en su envase figuran las siglas CE.Además, recuerde que los establecimientos deberán disponer de hojas de quejas y reclamaciones a disposición de las personas consumidoras, para lo cual se exhibirá un cartel de tal forma que se pueda conocer claramente su existencia.Igualmente, a la hora de comprar es conveniente optar por establecimientos que exhiban el logotipo de adhesión al Sistema Arbitral de Consumo, que garantizan una resolución rápida y gratuita en caso de discrepancia. Además, debe conservase siempre el justificante de la compra para poder reclamar o solicitar posibles devoluciones.

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