La campaña de inspección que la Dirección General de Consumo de la Consejería de Salud ha realizado sobre los aceites etiquetados como oliva virgen y virgen extra forma parte de las actuaciones habituales que desarrolla la dirección general para comprobar que no se vulneran los derechos de los consumidores. Además, algunos colectivos agrarios habían puesto de manifiesto que podía existir un fraude al consumidor por los precios tan bajos que marcaban estos productos en algunos establecimientos.
1. La Consejería de Salud, a través de la Dirección General de Consumo, realizó por ello una campaña de inspección en las estanterías de los supermercados dirigida, en el 90% de los controles, a los aceites etiquetados como de oliva virgen y oliva virgen extra con precio inusualmente bajo respecto al precio habitual de estos productos por la calidad que los mismos tienen.
2. La Dirección General de Consumo ha inspeccionado diferentes establecimientos comerciales y puntos de venta a los que acceden los consumidores analizando en concreto marcas de aceite con precios excepcionalmente bajo. Tras este análisis ha constatado que 24 de los 50 lotes revisados contenían un aceite de oliva de calidad inferior a la que aparecía en el etiquetado del producto.
3. En aras de proteger y defender los derechos de los consumidores y usuarios frente a un posible fraude, Consumo ha iniciado un procedimiento administrativo y ha comunicado a las empresas la inmovilización de estos productos como medida cautelar y prohibición de la venta y comercialización de los diferentes lotes. Si bien, se trata de productos seguros para el consumo y que no suponen ningún riesgo para la salud.
4. La campaña de inspección no ha concluido. En una segunda fase, se va a comprobar la trazabilidad y el origen del aceite, una actuación competente de la Consejería de Agricultura y Pesca.
5. La orden de inmovilización cautelar se ha tomado a raíz de los primeros resultados de los análisis encargados de cotejar si la calidad del aceite de oliva envasado se corresponde con el que se anuncia en la etiqueta. A partir de esta orden, se abrirá un procedimiento administrativo sancionador en el que si la empresa no acepta los resultados puede solicitar un análisis contradictorio. Si el resultado de los dos no coincidiesen, un laboratorio realizaría un tercero con carácter urgente que sería el definitivo para determinar la categoría del aceite analizado.
6. Una vez se finalice este procedimiento, la Consejería de Salud dará a conocer toda la información pertinente. Mientras tanto, con el objetivo de velar por los intereses económicos de los consumidores, se ha procedido a la inmovilización cautelar de estos lotes.
7. Las inspecciones se han realizado principalmente en aquellos aceites etiquetados como oliva virgen o virgen extra y ofertados a un precio excepcionalmente bajo.
8. En concreto, son 24 lotes de marcas con origen en diferentes puntos del país los que incumplen los criterios de calidad ya que contienen, según los primeros análisis. un aceite de oliva de calidad inferior al que aparecía en el etiquetado del producto.
9. La directora general de Consumo se encuentra reunida esta mañana con los consumidores para trasladarle la situación actual del procedimiento y ofrecerles todos los detalles.
10. La Consejería de Salud quiere reiterar que estos productos se han inmovilizado para velar por los derechos económicos de los consumidores y no existe riesgo para la salud.